domingo, 11 de noviembre de 2012

TRANSFERENCIA DE RENTA, BANCOS Y PARAÍSOS FISCALES, LOS PILARES DEL ACTUAL SISTEMA


"Evitar los impuestos es el único esfuerzo intelectual que tiene recompensa”
John Maynard Keynes

La crisis actual por la que atraviesa el sistema rentístico-financiero a escala global, ha puesto de manifiesto en los últimos años de qué manera funciona el aceitado mecanismo utilizado por la rosca financiera mundial para transferir riquezas desde la periferia hacia el centro.



Estudios recientes, demuestran las importantes cifras que manejan aquellos que evaden y luego depositan sus abultadas ganancias en paraísos fiscales. El Tax Justice Network –TJN- en un reciente informe, demuestra la importancia que tienen estos “paraísos” en la estafa millonaria mundial, la cual es llevada a cabo fundamentalmente por bancos, empresas multinacionales, etc. Sostiene “que el monto de fondos de la riqueza privada que se encuentra invertido en más de 80 jurisdicciones offshore (extraterritoriales) -donde las cuentas se manejan bajo reserva y prácticamente libre de impuestos-, fluctúa entre 21 y 32 billones de dólares (o sea, millones de millones)”[1], cifra que considera conservadora.

Esta millonaria suma, como señala el Informe[2], proviene en su mayoría de países periféricos cuyas economías se verían sumamente beneficiadas de no ser esquilmadas por estos señores. “De este total, alrededor de un tercio, esto es entre7,3 9,3 billones de dólares, provendría de 139 países de bajo o mediano ingreso. Es más, el 61% de este monto corresponde a un grupo de solo 10 países, que incluye a Brasil, México, Venezuela y Argentina. Se trata principalmente de rentas financieras acumuladas desde los años 70 por las élites privadas de estos países, y que no se han registrado en sus países de origen”[3].

La transferencia, en el caso de la Argentina, es llevada a cabo por los sectores concentrados locales y por las multinacionales que operan en nuestro territorio. Es decir, el trabajo y esfuerzo de millones de argentinos va a parar a las Bahamas, Islas Caimán, etc. Frente a esto celebramos el hecho de que el Gobierno Nacional haya cortado parte del chorro que se filtra al exterior, mediante medidas tales como: obligación de liquidar en el país divisas a petroleras y mineras, expropiación de YPF a Repsol (quien giraba todas sus utilidades al exterior y sometía a la emblemática empresa a una desinversión constante), restricción a la compra de dólares, etc.

Siguiendo con el informe, el estudio demuestra que gran parte de estos países, como la Argentina, considerados deudores, en realidad serían prestamistas netos, si estos recursos no se hubiesen sustraído de su sistema financiero. “En efecto, los 139 países mencionados, registraban una deuda externa bruta agregada de US$ 4,08 billones en 2010. Al restar las reservas en el exterior de estos países, invertidas mayoritariamente en valores en el Primer Mundo, se constata que su deuda externa neta agregada suma una cifra negativa de US$ 2,8 billones para 2010. De allí se concluye que, si a ello se suman los recursos desviados al sistema offshore, estos países supuestamente endeudados, no tienen nada de deudores: son prestamistas netos, del tenor de $10,1 a $13,1 billones[4].

“La pérdida en términos tributarios es también enorme: teniendo en cuenta las ganancias no declaradas que han generado estas inversiones offshore desde 1970, la pérdida en los últimos 40 años podría alcanzar alrededor de US$ 3,7 billones, estima el estudio”. Si hacemos una cuenta de lo que le corresponde a la Argentina, haciendo un cálculo general sobre los 139 países, la evasión rondaría los 27.000 millones de dólares. Hoy, si nuestro país volcase dicha cifra al circuito productivo, la Argentina sería muy distinta.

En este sentido, podemos observar en un estudio realizado por la institución inglesa Christian Aid, la cual ha determinado que: “los países en desarrollo pierden anualmente 160.000 millones de dólares en recaudación debido a la evasión de las transnacionales. Este monto, que es superior a lo destinado a la Ayuda Oficial al Desarrollo global, tiene un gran impacto sobre la población puesto que, de ser usado para atender servicios de salud, podría salvar la vida de 350 mil niños”[5].

Por otro lado, uno de los principales mecanismos utilizados por las multinacionales son los acuerdos de inversión extranjera, mejor conocidos como inversión extranjera directa (IED), cuyo principal promotor ha sido el Estado norteamericano. “La mayoría de acuerdos de inversión extranjera –incluidos los TLCs- se acompañan de acuerdos de doble imposición. Estos acuerdos generalmente prevén que los inversionistas extranjeros puedan tributar en su país de origen, y no en el país que les provee los recursos, mano de obra, servicios, etc. con los cuales realizan sus ganancias. Muchas veces, mediante subterfugios como la subfacturación de exportaciones o la sobrefacturación de importaciones, estas empresas terminan sin pagar en ninguno de los dos países: o sea, se produce una doble evasión, y estas rentas se desvían hacia los paraísos fiscales”[6].

En nuestro caso, la AFIP ha detectado las maniobras (triangulaciones comerciales nocivas) por parte de la cerealera multinacional Cargill y la aceitera Bunge, para defraudar al Estado en algo así como 1.400 millones de pesos[7].

Sin embargo, los más beneficiados en este esquema han sido y son los bancos, a la sazón principales responsables de la actual crisis financiera internacional, “se benefician enormemente de este flujo de capitales hacia sus instituciones financieras: del City Bank en Nueva York a City Bank Cayman Islands; o del Morgan Bank a Morgan Panamá, por ejemplo”[8].

El traslado de los fondos hacia los paraísos fiscales en todos los casos ha sido realizado con asistencia de la banca internacional. Según el informe[9], los tres bancos privados que manejaron la mayor cantidad de los fondos offshore son UBS, Credit Suisse y Goldman Sachs, ¿Le suena estos nombres?

Frente al saqueo internacional llevado a cabo por estas instituciones financieras y comerciales, se hace necesario rediscutir en nuestro país algunos temas claves para evitar estar en la lista que señalábamos al principio. Se torna fundamental para la profundización del actual modelo económico argentino reformar la Ley de Inversiones Extranjeras, la actual Ley de Entidades Financieras, la Ley de Inversiones Mineras y dar por tierra definitivamente con la Ley de Convertibilidad y plasmar este proceso en una nueva Constitución Nacional, seguido de un proceso de reformas de las constituciones provinciales.

Todo esto como condición necesaria para despojarnos del marco jurídico implantado en nuestro país a partir del 1976 en adelante, que poco tiene que ver con la Argentina de los últimos años.



[1] Sally Burch, Los paraísos fiscales y la fuga de capitales, http://alainet.org/active/59232
[2] James S. Henry, The Price of Off-shore Revisited, Tax Justice Network, Julio 2012. http://tjn-usa.org/storage/documents/Price_of_Offshore_Revisited_72612.docx
[3] Sally Burch, Los paraísos fiscales y la fuga de capitales, http://alainet.org/active/59232
[4] Ibíd.
[6] Sally Burch, Nota citada.
[7] Galand Pablo, Cargill y Bunge son la punta del iceberg de la evasión fiscal,http://sur.infonews.com/notas/cargill-y-bunge-son-la-punta-del-iceberg-de-la-evasion-fiscal
[8] David Spencer, entrevista con la Agencia periodistica ALAI.





Hernán Ramón



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